Un vendedor inexperto empieza muchos proyectos y acaba pocos. Se diversifica en muchas direcciones. Sus esfuerzos se derrochan. No utiliza un enfoque sistemático en sus actividades.
Los vendedores con capacidad de fijar objetivos claros y hábitos de trabajo eficientes, tienen experiencia y madurez.
Tener vendedores que sean capaces de dirigirse ellos mismos hacia objetivos específicos y claramente establecidos, siguiendo hábitos eficientes de trabajo, son el sueño de la mayoría de directores de ventas.
«Garantizar» una captación y formación, con una ADECUADA remuneración, nos librará de innumerables problemas y, en numerosas ocasiones pérdidas dinerarias a veces irreparables.
Tú pones tu tiempo, tus conocimientos, tu vehículo, tu móvil, tu ordenador, cubres tus costes de manutención, gasolina y hospedaje… y, nosotros te damos una comisión, normalmente irrisoria…
No hijo, no.